Mientras el gobierno vocifera que la salud en Venezuela es gratuita y que todo está en las mejores condiciones gracias a los logros de la revolución, los venezolanos cada vez sufren la decadencia de los hospitales y sobre todo la hiperinflación que golpea sus bolsillos a la hora de cancelar cualquier tratamiento médico.
Jorge González / El Político
El presidente de la Fundación Amigos del Paciente Renal (Fundaprel), Daniel Colmenares, señaló en una entrevista para El Impulso, que un ciudadano que requiere de un trasplante deberá pagar alrededor de 800 millones de bolívares, además que indicó que en el sistema de salud pública los trasplantes están paralizados.
Colmenares alertó que los pacientes con enfermedades crónicas son los más afectados en la actualidad. “La salud es un derecho humano universal que no puede ser violentado ni por demócratas, ni por dictadores, ni por capitalistas, ni por socialistas, ni por comunistas, ni por nadie”, manifestó.
Asimismo, apuntó que “es mentira” que en el país hay acceso a la salud “porque desgraciadamente cuando el Gobierno habla de que es necesario tener el ‘Carnet de la Patria’ para poder ser atendido, se viola ese derecho”.
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