SpaceX y Vast, una empresa emergente en el mundo de los vuelos espaciales privatizados, esperan poner en órbita la primera estación espacial comercial a finales de 2025.
El Político
No está claro cuánto costará el acuerdo, anunciado por la empresa aeroespacial emergente con sede en California. La dirección de la empresa declinó hacer comentarios al respecto a la CNN, reportó CNN.
Tampoco está claro cuánto costaría un viaje a la estación espacial propuesta a los visitantes, que podrían incluir astronautas profesionales o turistas.
Jed McCaleb, fundador y consejero delegado de Vast, que anteriormente hizo una fortuna en el negocio de las criptomonedas, dijo en un comunicado que la compañía está "encantada de embarcarse en este viaje de lanzar la primera estación espacial comercial del mundo, Haven-1, y su primera tripulación, Vast-1″.
McCaleb dijo que está invirtiendo 300 millones de dólares de su propio dinero en el esfuerzo, y que no planea buscar inversión externa para Vast hasta que la empresa tenga su estación espacial propuesta construida y pueda generar ingresos.
Añadió que reconoce que el proyecto global le costará probablemente más de 300 millones de dólares.
Announcing the Haven-1 and Vast-1 missions to low-Earth orbit. Launched by @SpaceX, Haven-1 is scheduled to be the world’s first commercial space station and will be visited by a crew of four aboard a Dragon spacecraft during Vast-1 → https://t.co/ToxFSiyQJj pic.twitter.com/YSPrM9Krtr
— VΛST (@vast) May 10, 2023
Panorama general
Vast anunció el plan esta semana, afirmando que Haven 1 es el primer paso en la construcción de una gran estación espacial habitable que está actualmente en desarrollo.
De esta manera, Haven 1 funcionará primero como una pequeña estación espacial propiamente dicha y podrá tripular hasta cuatro personas a la vez.
Vast espera poner Haven 1 en órbita "no antes de agosto de 2025″ mediante un cohete Falcon 9 de SpaceX.
Una vez que Haven 1 esté en órbita, Vast lanzará su primera tripulación de cuatro personas en una nave espacial SpaceX Dragon que se acoplará a Haven 1 y vivirá en la pequeña estación durante 30 días.
En la actualidad, el proyecto está financiado exclusivamente por el director ejecutivo de Vast, Jed McCaleb.
Vast planea poner en órbita más módulos después de que Haven 1 esté en órbita con la esperanza de conectarlos todos en una estación espacial más grande capaz de albergar tripulaciones más numerosas.
Está previsto que la estación mayor mida 100 metros de largo y cree gravedad artificial mediante rotación. Haven 1 acogerá las pruebas primarias de este sistema de gravedad artificial.
We're building a world-class team based out of our Long Beach, CA HQ (and other locations). Join us as we build the future and enable humanity's expansion into the solar system!
Check out our open positions here ➡ https://t.co/VfGmr2AgxY pic.twitter.com/Ji0umLpYas
— VΛST (@vast) May 10, 2023
Entre líneas
Haven 1 es el primer proyecto de estación espacial financiado por particulares y empresas. Utilizará cohetes comerciales para poner en órbita una estación espacial de construcción comercial.
Sin embargo, Vast ha solicitado financiación a la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA), que a su vez está financiada por el gobierno de EEUU. Como tal, la financiación de la NASA sería técnicamente fondos públicos.
Pero no seguro que Vast se convierta efectivamente en la primera empresa en poner en órbita una estación espacial privada.
McCaleb afirma que Vast tendrá ventaja porque puede aprovechar los sistemas de soporte vital ya desarrollados para la nave Dragon de SpaceX, que la empresa planea utilizar para transportar pasajeros a su estación espacial.
Vast equipará su estación espacial Haven-1 con los consumibles necesarios -como oxígeno y otros materiales para mantener la vida-, pero la empresa no tendrá que desarrollar un sistema de soporte vital desde cero, explicó McCaleb a la CNN.
En contexto
Otras empresas, entre ellas varias que cuentan con el respaldo de la NASA, también están trabajando en el desarrollo de estaciones espaciales privadas.
La NASA, junto con sus socios de todo el mundo, pretende utilizar una estación espacial privada para sustituir a la Estación Espacial Internacional, que lleva habitada ininterrumpidamente en órbita terrestre baja desde el año 2000.
La administración Biden-Harris y los responsables de Canadá, Japón y los países participantes en la Agencia Espacial Europea autorizaron que la ISS siguiera en funcionamiento hasta 2030.
Pero el otro socio clave de la Estación Espacial Internacional, Rusia, ha dicho que sólo garantizará su participación hasta 2028.
No está claro qué parte de los 300 millones de dólares que McCaleb ha asignado al proyecto Haven-1 se destinará a SpaceX por los servicios de lanzamiento. Vast no compartió detalles financieros sobre su acuerdo con la empresa.
"El equipo Dragon y el equipo y la dirección (de SpaceX) realmente quieren construir una estación espacial basada en Falcon 9″, dijo Max Haot, presidente de Vast. Haot dirigió la empresa aeroespacial Launcher antes de que fuera adquirida por Vast en febrero. "Así que estamos muy, muy alineados".
¿Qué se puede esperar?
La estación espacial Haven-1 de Vast, sencilla y de estructura única, podrá lanzarse sobre un cohete Falcon 9 de SpaceX, el vehículo de trabajo que SpaceX lleva lanzando desde hace más de una década.
Tras la puesta en órbita de la nave, SpaceX proporcionaría entrenamiento a cuatro miembros de la tripulación aún sin nombre para una misión bautizada como Vast-1.
"Vast vende hasta cuatro plazas tripuladas en la misión inaugural a Haven-1″, dijo la compañía en un comunicado de prensa. "Entre los clientes previstos figuran agencias espaciales nacionales e internacionales y particulares implicados en proyectos científicos y filantrópicos".
Inicialmente, la empresa tiene previsto que Haven-1 funcione de forma independiente, flotando libremente en la órbita terrestre. Más adelante, la empresa planea acoplar la nave espacial como módulo a una estación espacial mayor.
Según Vast, su objetivo final es crear una gran estación espacial en órbita con gravedad artificial que podría lanzarse sobre un vehículo SpaceX Starship, un cohete aún en fase de desarrollo que explotó en el aire durante su vuelo de prueba inaugural en abril.