Las fuerzas de seguridad de Suiza frustraron una operación de espionaje encarada en agosto por agentes de inteligencia rusos que pretendían ser plomeros en la ciudad de Davos, lugar donde se realiza cada año el influyente Foro Económico Mundial, según reveló este martes el periódico Tages-Anzeiger.
El Político
La edición 2020 del Foro, que reúne a los principales líderes mundiales y a la élite económica global, comenzó precisamente este martes y continuará hasta el viernes, y se cree que los agentes de inteligencia estaban desplegando equipo de vigilancia en la ciudad de cara a este evento, cuando fueron descubiertos.
Según el reporte del Tages-Anzeiger, los dos plomeros rusos fueron demorados por la policía suiza en agosto de 2019 y en medio de una investigación. Entonces los hombres presentaron pasaportes diplomáticos rusos, aunque no estaban acreditados en Suiza, y finalmente pudieron abandonar el país apelando a su inmunidad.
Los hombres fueron demorados ya que tanto la policía como las autoridades federales suizas sospechaban que eran agentes de inteligencia encubiertos, que se hacían pasar por plomeros para poder instalar equipos de vigilancia en diferentes sitios estratégicos de la ciudad que recibe cada año a los más poderosos del planeta, de acuerdo al reporte.
Al no estar acreditados en Suiza, en un principio se les negó acceso a la inmunidad diplomática, pero luego miembros de la embajada rusa en Berna habrían presionado para su liberación.
La policía del cantón de Grinsons confirmó haber realizado un “chequeo de identidad de rutina” a dos ciudadanos rusos en agosto de 2019, pero señaló que no se había establecido un vínculo entre su visita a la ciudad y el Foro de Davos, de acuerdo a la agencia Reuters.
“Es verdad que chequeamos a dos ciudadanos rusos en Davos y que ellos se identificaron con pasaportes diplomáticos, pero no pudimos establecer ninguna razón para detenerlos. Los liberamos”, señaló una portavoz de la policía, negando que los hombres hayan sido tomados por plomeros.
En tanto un portavoz de la embajada de Rusia en Berna desestimó el reporte del Tages-Anzeiger, señalando que los dos diplomáticos rusos estaban acreditados fuera de Suiza, fueron chequeados por la policía y luego liberados.
“Los pasaportes diplomáticos son entregados a funcionarios de alto rango, no a trabajadores manuales”, dijo, en referencia a su presunta fachada como plomeros. “Creo que probablemente esto haya sido una broma tonta”, agregó.
La portavoz también alegó que los hombres estaban en Davos participando de un evento de la Fundación Roscongress, controlada por el estado ruso, en el Foro Económico Mundial.
Mientras que Maria Zakharova, portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, dijo desde Moscú a la agencia Reuters que no estaba al tanto del incidente.
Bill Browder, gerente de un fondo de inversión que ha dirigido una campaña para exponer la corrupción en Rusia y castigar a los funcionarios del Kremlin que él cree responsables de la muerte de su abogado, Sergei Magnitsky, fallecido en una prisión de Moscú en 2009 tras quejarse por una serie de maltratos, aseguró que el incidente con los plomeros-espías muestra el alcance del estado ruso.
“Los rusos están apuntando activamente contra sus enemigos en diferentes países. Tienen enormes recursos y Davos es un lugar importante, es el único lugar al que puedo venir y desafiar personalmente a funcionarios rusos por el asesinato de Sergei Magnitsky”, dijo el angloestadounidense, quien se encuentra en la ciudad suiza asistiendo al Foro Económico Global. La muerte de Magnitsky ha dado lugar a una ley en Estados Unidos que sanciona a todos los funcionarios rusos que so considerados responsables.
Fuente: Infobae
