En su lucha por hacer realidad la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea la primera ministra británica, Theresa May, ha asumido muchos riesgos y esta oportunidad no es la excepción al querer buscar un pacto con la oposición que ayude a materializar el Brexit.
Redacción El Político
“Hay diversas áreas en las cuales los dos principales partidos estamos de acuerdo. Ambos queremos terminar con la libre circulación (de ciudadanos comunitarios), ambos queremos salir (de la UE) con un buen acuerdo y ambos queremos proteger los puestos de trabajo”, dijo May a través de un comunicado.
El tiempo apremia. Tras el rechazo del ala euroescéptica del Partido Conservador en tres ocasiones el acuerdo del Brexit en la Cámara de los Comunes, May aseguró que trataría de ganar el respaldo del Partido Laborista, que lidera Jeremy Corbyn.
Lo que ha generado controversia entre ministros y diputados conservadores quienes describen a Corbyn como marxista de extrema izquierda.
A pesar de las presiones internas en las que miembros del Partido Conservador aseguran que los votantes no están de acuerdo con el proceso que se está llevando a cabo para poner fin a la participación del Reino Unido en el Parlamento Europeo. “Ellos no quieren ver cómo se entrega el poder sobre el Brexit a Jeremy Corbyn”, señala esa misiva, que advierte que “el apoyo al partido en todo el país está en caída libre”.
Sobre la primera ministra recae la responsabilidad de una prórroga larga del Brexit, si este acercamiento falla también lo haría el brexit, la primera ministra y el partido conservador, por lo que May tendría que renunciar y posiblemente incluso convocar elecciones generales.
Con información de huffingtonpost