El Palacio Presidencial en Bagdad, Irak, fue asaltado este lunes por seguidores del clérigo chií iraquí Muqtada al Sadr debido al anuncio de la partida de la política de dicho influyente líder religioso.
El Político
La seguridad fue el objetivo principal de la nación, por ello las autoridades autorizaron un toque de queda en la capital que luego fue ampliado a todo el país.
Hay al menos 12 manifestantes muertos y otras decenas de heridos, según informó a EFE una fuente de seguridad. Aunque no se conoce quiénes han sido los responsables, medios afiliados a las milicias proiraníes de Irak que actúan bajo el paraguas de la agrupación gubernamental armada Multitud Popular, de sus miembros disparando al aire durante la manifestación de los sadristas.
"La comandancia de Operaciones Conjuntas anuncia un toque de queda integral en todas las provincias de Irak a partir de las 19.00 (16.00 GMT) de hoy, lunes, y hasta nuevo aviso", dijo el portavoz del Comandante de las Fuerzas Armadas, Yehia Rasul, en Twitter.
El anuncio del clérigo chií se produjo este lunes en medio de la parálisis que vive el país árabe desde las elecciones de octubre. En ese momento, centenares de seguidores de Al Sadr, que llevaban cuatro semanas acampados frente al Parlamento, entraron en la fortificada "Zona Verde" e irrumpieron en el Palacio Presidencial y la sede del Gobierno. El primer ministro iraquí en funciones, Mustafa al Kazemi, confirmó en un comunicado la entrada de los manifestantes en el Palacio del Gobierno, y anunció la suspensión de las sesiones del Ejecutivo "hasta nuevo aviso".
Muqtada al Sadr ha iniciado una huelga de hambre "hasta que cese la violencia" en Irak
"Su Eminencia anuncia una huelga de hambre hasta que cese la violencia y el uso de las armas. Porque echar a los corruptos no da a nadie, sea quien sea, una justificación para el uso de la violencia", dijo en un breve comunicado en su página de Facebook uno de los líderes del Movimiento Sadrista, Hasan al Azari.
Imágenes en las redes sociales mostraron a decenas de manifestantes, en los accesos, las salas e incluso la piscina del Palacio Presidencial, así como la presencia refuerzos de los efectivos de seguridad en el interior de la "Zona Verde", que alberga también sedes de las principales instituciones del Poder Judicial, incluido el Tribunal Federal Supremo.
"Había decidido no intervenir en los asuntos políticos, pero ahora anuncio mi retirada definitiva y el cierre de todas las instituciones (sedes)" del Bloque Sadrista, afirmó en un comunicado el líder iraquí, que lleva condicionando la política del país desde principios de siglo y ha instigado los dos recientes asaltos al Parlamento.
Al Sadr, cuyo movimiento salió vencedor de los comicios de octubre con 73 de los 329 escaños del Legislativo, afirmó que con su actividad política "sólo quería reparar la deformación que, en su mayoría, causaron las fuerzas políticas chiíes, siendo las mayoritarias del país (…) sólo quería acercarlas al pueblo para que sientan su sufrimiento".
Lo que distingue a Al Sadr de otros partidos y milicias chiíes es su desvinculación de Teherán, que en los últimos años ha ejercido cada vez más influencia en Irak, pero el clérigo aboga por la soberanía de su país, el patriotismo y la independencia a pesar de sus vínculos con el vecino.
La ONU advierte de que la situación es "extremadamente peligrosa" en Irak
La misión de Naciones Unidas en Irak ha advertido de que los incidentes en Bagdad representan "una escalada extremadamente peligrosa". "La UNAMI (Misión de Asistencia de Naciones Unidas en Irak) urge a todos a mantener la calma, cooperar con las fuerzas de seguridady evitar acciones que puedan desencadenar una cadena de acontecimientos imparable", indicó en un comunicado en el que alertó de que "la supervivencia del Estado (iraquí) está en juego".
Además, la nota pide a los manifestantesque abandonen "inmediatamente" los edificios gubernamentales y la "Zona Verde" y hace un llamamiento "todos los actores" políticos para "trabajar a favor de rebajar la tensión y restablecer el diálogo como único medio para resolver las diferencias" y aseveró que "el respeto al orden constitucional será ahora vital".
Fuente: público.es