Una pelea multitudinaria entre diputadas del partido islamista gubernamental y la oposición izquierdista obligó hoy a cancelar la sesión del Parlamento de Turquía y causó dos heridas, de las que una fue hospitalizada.
El enfrentamiento empezó durante una sesión en la que se votaba la prevista reforma constitucional mediante la que el partido gubernamental, el islamista Justicia y Desarrollo (AKP), prevé entregar el poder ejecutivo al presidente, anulando el cargo del primer ministro.
La diputada Aylin Nazliaka, hasta mayo pasado miembro del socialdemócrata Partido Republicano del Pueblo (CHP), el mayor de la oposición, se colocó esposas para encadenarse al micrófono al tomar la palabra en el estrado, bloqueando así el desarrollo de la sesión.
Declaró querer así protestar contra el Movimiento de Acción Nacionalista (MHP), el menor de los cuatro partidos del hemiciclo, que apoya la reforma pese a hallarse en la oposición y en contra de la opinión de gran parte de sus bases.
Al cabo de un rato, varias diputados del AKP arremetieron contra Nazliaka y otras del izquierdista y prokurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP), opuesto a la reforma, intentaron protegerla, por lo que se desencadenó una pelea generalizada.
La trifulca, con empujones, golpes y tirones de pelo, derribó a Safak Pavey, una diputada del CHP que es discapacitada física, y acabó con una política del HDP hospitalizada por un golpe en el pecho.
También fue herida la propia Nazliaka, cuando intentaron desencadenarla del micrófono.
"Nos atacaron como locas. Es un indicio de lo que harán con nosotras después de aprobar la reforma", dijo Pavey, en declaraciones recogidas por el diario Hürriyet.
Las peleas a puñetazos no han sido raras en los últimos meses en el hemiciclo turco, pero es la primera vez que son protagonizadas por las mujeres de la Cámara.
Los 18 artículos de la reforma constitucional propuesta por el AKP se aprobaron con mayoría de tres quintos en la primera ronda durante este mes y están sometidos ahora a una segunda ronda de votaciones que está previsto que concluya este fin de semana.
Al no alcanzar los dos tercios de los votos, la reforma debe ser sometida luego a referéndum y se prevé que la consulta tenga lugar en abril.
Con información de EFE