El alcalde del municipio Chacao, un bastión opositor en Caracas, Ramón Muchacho, fue condenado a 15 meses de cárcel por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), informó la corte la madrugada de este martes. AFP
La “Sala Constitucional del TSJ sanciona con 15 meses de prisión a Ramón Muchacho”, anunció la magistratura, luego de más de seis horas de deliberaciones.
El fallo, además, contempla la destitución del funcionario por “falta absoluta” y su “inhabilitación política”.
Muchacho integra un grupo de alcaldes opositores en Venezuela a los que la Sala Constitucional del máximo tribunal había amenazado con cárcel si no impedían bloqueos de vías durante las protestas que enfrenta hace cuatro meses el presidente Nicolás Maduro, que dejan unos 125 muertos.
“Vamos a proteger y a defender el derecho a la protesta pacífica”, declaró entonces el dirigente opositor.
Se le castiga ahora “por desacato”, explicó un boletín del TSJ.
Sala Constitucional del TSJ sanciona con 15 meses de prisión a Ramón Muchacho
— TSJ Venezuela (@TSJ_Venezuela) 8 de agosto de 2017
El 28 de julio fue detenido Alfredo Ramos, alcalde del municipio Iribarren (estado Lara, oeste), cumpliendo una orden del TSJ.
La corte -acusada por la oposición de servir al gobierno de Maduro- exigía a los alcaldes tomar medidas para garantizar el “libre tránsito”. Si incumplían, advertía, afrontaban penas de hasta 15 meses de prisión.
Para el miércoles, el TSJ citó a otro opositor que gobierna un municipio caraqueño, David Smolansky, alcalde de El Hatillo, incluido en el listado.
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Se desconoce el paradero de Muchacho y, por ello, el TSJ ordenó al servicio de inteligencia tramitar “la orden de alerta roja” ante Interpol “para lograr su ubicación y captura”.
El mes pasado, al regresar al país tras viajar a Perú y Chile, Muchacho denunció que autoridades migratorias le quitaron y le anularon su pasaporte.
En 2014, en otra oleada de protestas contra Maduro que causó 43 muertes, alcaldes opositores como Enzo Scarano o Daniel Ceballos fueron destituidos y encarcelados, acusados de permitir hechos violentos.
Scarano está en libertad, tras haber pasado diez meses en prisión, y Ceballos todavía sigue encarcelado.