El presidente estadounidense Donald Trump prometió una respuesta "bastante dura" a Corea del Norte, tras su disparo de un misil balístico intercontinental, un día después de que Estados Unidos y Francia pidieran nuevas sanciones contra Pyongyang.
Llamo a todas las naciones a afrontar esta amenaza global y a demostrar públicamente a Corea del Norte que hay consecuencias a su muy, muy mal comportamiento", declaró Trump durante una visita a Varsovia, antes de participar en una cumbre del G20 en Hamburgo (Alemania).
Washington se plantea tomar medidas "bastante duras", añadió, sin dar más detalles.
Horas después, su secretario de Defensa, Jim Mattis, explicó que esas medidas serían diplomáticas.
Estamos lidiando con una muy seria escalada militar, una provocación, una afrenta a las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU", dijo Mattis en Washington.
Seguimos en la ruta diplomática, involucrando a nuestros aliados y naciones amigas en todo el mundo", añadió.
La víspera, Estados Unidos, respaldado por Francia, mostró en la ONU su intención de proponer nuevas sanciones contra Corea del Norte, pero Rusia ya advirtió que se opondrá.
El lanzamiento del misil norcoreano, que según expertos puede alcanzar Alaska, "es una clara y nítida escalada militar", aseguró la embajadora estadounidense ante la ONU, Nikki Haley.