Las autoridades venezolanas recibieron este miércoles un cargamento con 30 millones de billetes de 1.000 bolívares para completar la nueva familia monetaria que debía entrar en circulación el pasado 15 de diciembre, y que lo ha ido haciendo progresivamente debido a un supuesto sabotaje internacional, reseña EFE.
Redacción El Político
"Queremos anunciarle al pueblo venezolano que con la llegada de estos billetes con denominaciones de 1.000 ya se complementa toda la familia del cono monetario que conforma el mercado nacional", dijo el director del Banco Central de Venezuela (BCV), José Khan, al canal estatal VTV.
Desde el aeropuerto internacional de Maiquetía, que sirve a Caracas, el funcionario remarcó que el ente emisor ya maneja todas las nuevas denominaciones en papel -500, 1.000, 2.000, 5.000, 10.000 y 20.000 bolívares-, lo que permitirá, según dijo, un mejor flujo en las transacciones en el país caribeño.
Venezuela recibe octavo cargamento de billetes nuevos
"También se han introducido en el mercado monedas que son muy importantes, de denominaciones de 100, de 50 y de 10. Estas han sido troqueladas en la Casa de la Moneda", prosiguió Khan para luego precisar que 11,8 millones de ellas ya han sido inyectadas en el mercado.
Afirmó además que los bancos "están trabajando con mucha normalidad" en relación con la nueva familia de billetes y monedas, al tiempo que el BCV ya está elaborando los inventarios para tener un registro de estas piezas nuevas.
Arriba a Maiquetía nuevo cargamento de billetes con 30 millones de piezas de Bs. 1.000 #ConoMonetarioBCV pic.twitter.com/c6sGmDgA17
— BCV (@BCV_ORG_VE) 22 de febrero de 2017
Para hacer frente a supuestas mafias internacionales que almacenaban el papel moneda para desestabilizar la economía, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, decidió que los papeles de 100 bolívares, equivalentes a 15 centavos de dólar y hasta hace unos meses los de mayor valor, perderían su legalidad en diciembre.
Sin embargo, su vigencia se ha prorrogado ya en cuatro ocasiones debido al retraso en la llegada del nuevo cono monetario, que el Gobierno achaca, entre otras cosas, a que varios aeropuertos internacionales retuvieron aviones con billetes.