La vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, confirmó este martes, en charla informal con los periodistas en el 38 homenaje a la Constitución en el Congreso, que pretende incorporarse con cierta normalidad al "paisaje" político en Cataluña y este mismo miércoles ha trasladado su despacho de trabajo a Barcelona. Santamaría tiene previsto comer con empresarios catalanes y se entrevistará bilateralmente con el responsable del PSC, Miquel Iceta y con la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas.
El gran encargo político de Mariano Rajoy a la vicepresidenta y ministra de Administraciones Territoriales para este mandato es que cambie el tono de las relaciones del Gobierno central con Cataluña en general y con sus dirigentes políticos. Santamaría ha tomado nota y ha emprendido una campaña de gestos para conformar otro clima y para facilitar una interlocución que estaba prácticamente rota. El equipo de la vicepresidenta está cerrando ya el catálogo de temas que abordará en breve con el vicepresidente catalán, Oriol Junqueras, con el que mantendrá probablemente en unos días una reunión de trabajo. Junqueras ya le adelantó a Santamaría que quiere abordar una ristra de 46 asuntos pendientes, entre los que incluye el referéndum de autodeterminación para Cataluña. Santamaría comentó a los periodistas el martes que ella está dispuesta a discutir y charlar sobre 45 de esas demandas, todas menos la independencia.
Santamaría comunicó precisamente en la toma de posesión del nuevo delegado, Enric Millo, que quería instalar un despacho. Pero no será un espacio para que trabaje solo la vicepresidenta. La idea de Rajoy y de Santamaría es que todos los ministros y altos cargos de relevancia del ejecutivo central tengan un lugar en Barcelona donde puedan convocar a sus interlocutores para realizar entrevistas y reuniones.
La vicepresidenta aclaró el martes, además, que su objetivo es ganarse cierta confianza con los dirigentes políticos catalanes para poder abordar todo tipo de asuntos y en ese sentido no renuncia aún a que el presidente catalán, Carles Puigdemont, acuda a mediados de enero a la Conferencia de Presidentes autonómicos con la que Rajoy quiere estrenar el curso político en 2017. Santamaría añadió así que Rajoy enviará en los próximos días la carta oficial con la convocatoria y que ella se encargará de cerrar con los responsables autonómicos una agenda de temas a tratar lo suficientemente atractiva "y con contenido" para convencer a todos los presidentes regionales de que es importante su asistencia. Esa agenda no está aún definida, pero se volcará en temas de Estado como la situación económica, la financiación de las comunidades, el empleo y el momento europeo.
Soraya Sáenz de Santamaría tendrá hoy la oportunidad de conversar también con la líder en Cataluña de Ciudadanos, Inés Arrimadas, con la que el PP catalán está marcando serias distancias en las últimas semanas porque cuestionan un presunto distanciamiento en el discurso crítico contra el nacionalismo, y también con el líder del PSC, Miquel Iceta, que está en plena negociación con la gestora del PSOE sobre el tipo de relaciones entre esos dos partidos para el futuro. La vicepresidenta mantendrá otras reuniones hoy en Barcelona con miembros de la sociedad civil catalana.
Con información de El País