La llegada de la subvariante BA.5 debe ser un recordatorio de que la línea de meta en esta carrera aún no se percibe por ningún lado.
¿Qué es la BA.5?
Esta es la más reciente subvariante del ómicron, la cual irrumpió en el planeta a finales del año pasado y tuvo una enorme ola de infección. Desde ahora, la BA.5 y una variante similar relacionada, BA.4, representan alrededor del 70% de todas las infecciones en Estados Unidos, según estimaciones de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades , basadas en parte en modelos. Estas dos subvariantes recién llegadas están facilitando una variante previa, la BA.2.
El nombre confuso no debería ocultar el poder de la BA.5. Eric Topol , profesor de medicina molecular en Scripps Research, asegura que la BA.5 “es la peor versión del virus que hemos visto”. Topol agrega: “Lleva el escape inmunológico, ya de por sí extenso, al siguiente nivel, y en función de eso, mejora la transmisibilidad”, mucho más allá de las primeras versiones de la ómicron. Topol informa que no ha habido un marcado incremento en las hospitalizaciones y muertes porque existe mucha inmunidad acumulada por la ola de ómicron de invierno. Sin embargo, hay aspectos de esta nueva variante a los que se deben estar muy atentos, ya que Estados Unidos sigue atascado en un tope incómodamente elevado de miseria pandémica. Además, las nuevas variantes están impulsando un aumentode casos en Europa.
En el centro de la diferencia de la BA.5 está su biología. La evolución le ha proporcionado mayor aptitud, un término que incorpora su capacidad de transmitir, crecer y evadir la inmunidad; la variante muestra una “marcada diferencia con todas las variantes previas”, informa Topol. Una forma en la que lo hace es evadiendo el sistema inmunológico del cuerpo, y la BA.4 y BA.5 juntas son “las variantes más evasoras de la inmunidad” vistas en múltiples estudios hasta la fecha.
Aún no se sabe con certeza si la BA.5 conducirá a casos de enfermedad más graves. Pero saber que el virus se está propagando debería reforzar la necesidad de las conocidas medidas de mitigación: cubrebocas de alta calidad, mejor filtración y ventilación del aire, y evitar la exposición en espacios cerrados abarrotados.