Yevgeny Prigozhin, fundador de la empresa militar privada llamada "Grupo Wagner", ahora es considerado como un "competidor peligroso" para el poder que ostenta el líder ruso Vladimir Putin.
El Político
Las tropas del grupo Wagner, lideradas por Prigozhin, están combatiendo junto a las fuerzas armadas de Rusia en su invasión a Ucrania.
Este personaje podría ser considerado, dependiendo para cada persona, o "la persona del año", o el "villano del año".
Reportan que desde Rusia, Putin confía en poder debilitar a este personaje, que ha tenido tenisones con el Estado Mayor del Ejército.
Efecto contrario
Sin embargo, el efecto podría ser el contrario, y más gente vería a Prigozhin como la figura con más probabilidades de suceder a Putin.
Desde el principio de la guerra contra Ucrania, Putin se aseguró de que no surgieran rivales a su poder y se esforzó mucho por garantizar que el conflicto no creara un líder militar popular que pudiera suponer una amenaza. Y lo logró. Por ejemplo, en el verano de 2022, el ambicioso general Alexander Lapin fue el objetivo de una pequeña campaña de relaciones públicas en línea que lo glorificaba. Esto de inmediato le costó el puesto a Lapin, así como una breve pero poderosa guerra mediática contra él a cargo de Prigozhin, quien controla una serie de fábricas de troles en línea.
Según fuentes que son cercanas al gobierno ruso, entonces Putin percibía a Prigozhin solo como un contrapeso para los generales. Para el presidente de Rusia, Prigozhin estaba de su lado, era una herramienta obediente y fácil de usar.
Carrera inesperada en crecimiento
Sin embargo, en años recientes, Prigozhin ha tenido una carrera inesperada. Al principio se le conocía como “el cocinero de Putin”, pues consiguió convertirse en contratista estatal de los almuerzos escolares para los niños de todo el país. Luego creó la fábrica de troles, la Internet Research Agency, y fue señalado en la investigación de Robert Mueller sobre la injerencia en las elecciones estadounidenses de 2016. Por último, Prigozhin se hizo famoso como fundador del Grupo Wagner, cuyos contratistas han combatido en África, Siria y ahora en Ucrania.
Estos logros por sí solos le aseguraron a Prigozhin la responsabilidad de las tareas más delicadas de Putin. Pero este año, Prigozhin pasó a otra liga, con lo que superó a todos los amigos de Putin en el poder. Entre algunos de ellos se encuentran el ministro de Defensa Serguéi Shoigú; el secretario del consejo de seguridad de Rusia, Nikolai Patrushev; el director ejecutivo de Rostec, la enorme compañía paraestatal de defensa, Sergei Chemezov; y el amigo más cercano de Putin, Yury Kovalchuk. Prigozhin los superó a todos y parece haberse convertido en el actor más importante de Rusia. Además de ser el operador político más popular es temido por altos funcionarios y empresarios rusos.
En conclusión
El meteórico ascenso político de Prigozhin comenzó este verano, cuando recorrió todas las cárceles rusas para reclutar prisioneros para Wagner, su ejército privado, para lo cual ofreció indultos a aquellos que combatieran en el frente en Ucrania: seis meses de servicio y luego la libertad.
Para hacer esto, Prigozhin tuvo que desafiar a varias agencias rusas de seguridad al mismo tiempo: el Servicio Penitenciario Federal, un Estado dentro del Estado en Rusia, así como al Servicio Federal de Seguridad, el Ministerio del Interior, la Fiscalía General y el Comité de Investigación. Todos esos grupos tienen un estatus especial, dependen únicamente del presidente Putin y nadie se atreve a rebatirlos. Pero entonces la situación cambió: apareció un personaje que estaba por encima de todos. Si Prigozhin puede liberar a cualquier prisionero, sus poderes son ilimitados.
Fuente: NY Times