Un Tribunal de apelaciones de Estados Unidos, confirmó este jueves 3 de agosto, mantener en vigencia de manera temporal la norma que restringe el asilo en la frontera sur.
El Político
El Gobierno de Estados Unidos decretó, en el mes de marzo, una normativa que restringe el acceso al asilo en la frontera con México, la cual sustituye al Título 42; una regla acatada por la administración Trump que permitía las devoluciones en caliente de migrantes, como un intento de evitar una posible expansión del coronavirus.
El Gobierno del presidente Biden argumentó que esta normativa es imprescindible para mantener el orden en la zona limítrofe del país norteamericano.
Aunque desde el gobierno haya conocimiento que la norma dificulta enormemente que las personas reciban asilo en Estados Unidos, existen ciertas solicitudes que aún pueden ser aceptadas, siempre y cuando se realicen desde el país de origen o desde un país de tránsito hacia Estados Unidos.
Esta decisión de la Corte de Apelaciones del 9º Circuito, suspende temporalmente una decisión de un tribunal de menor instancia, que había determinado que dicha política era ilegal y había ordenado al gobierno que pusiera fin a su uso.
En este sentido, la Administración Biden optó por presentar el caso ante un Tribunal de Apelaciones, con el fin de lograr continuar aplicando la norma mientras se confirma su legalidad en las cortes.
El Departamento de Seguridad Nacional difundió el jueves un comunicado en el que le atribuyó a la norma la notable reducción en la migración irregular.
“Para ser claros, seguiremos aplicando la regla y las consecuencias migratorias a quienes no cuenten con un argumento legal para permanecer en Estados Unidos”, dijo la agencia. “Alentamos a los migrantes a ignorar las mentiras de los traficantes y utilicen vías legales, seguras y ordenadas”.
Estados Unidos pone fin al titulo 42
El cambio surge a raíz de que Washington trataba de enmendar años de uso del Título 42, una medida de salud pública, la cual se oficializó durante la pandemia de covid-19. Esta evitaba que cualquier indocumentado entrara al país, siendo está la causa de la expulsión de 2.5 millones de migrantes, aproximadamente.
Sin embargo, el gobierno federal estaba preocupado por la posibilidad de un aumento en las llegadas de migrantes a Estados Unidos, debido a que finalmente podrían solicitar asilo.
Al momento del inicio de la nueva norma, en el norte de México, algunos migrantes, incluidos niños, se paseaban por la frontera estadounidense, reforzada con alambre de púas y soldados, sin saber exactamente a dónde ir ni qué hacer. Otros se instalaron en refugios, decididos a conseguir una cita de asilo que podrían tardar meses en obtenerla.
Tras ser aprobado el Título 8, la principal vía legal para solicitar asilo en EE.UU. sería a través de la aplicación móvil CBP One, que permitiría a los migrantes concertar citas con las autoridades para exponer sus casos.
EE.UU. ofreció en su momento, unas 1.000 citas diarias para solicitar asilo a través de este procedimiento, una cifra que, según contaron los funcionarios públicos, podría incrementarse “dependiendo de la capacidad” de los trabajadores del servicio de migración a medida de que pase ele tiempo.