La Gobernación de Texas comenzó la instalación de una especie de muro flotante en el Río Bravo como parte de las acciones para frenar el flujo migratorio.
El Político
Alicia Bárcena, secretaria de Relaciones Exteriores de México, informó que ya enviaron una nota diplomática de queja, pues alegan que la medida viola el Tratado de Aguas firmado en 1944.
México informó que ya se ha instalado en unos 300 metros de río en la zona que separa la ciudad mexicana de Piedras Negras y la estadounidense de Eagle Pass.
La canciller mexicana anunció que se enviará una “misión territorial a través de la Comisión Internacional de Límites de Aguas para definir en dónde están ubicadas estas boyas” colocadas por el gobernador de Texas, Gregg Abbott.
La nueva barrera flotante sobre el Río Bravo forma parte de la intensificación de las medidas del gobernador republicano para reforzar la seguridad en la frontera y el cruce irregular de inmigrantes.
Desde el pasado 11 de mayo cuando expiró el título 42 se han reportado un incremento de migrantes que intentan cruzar el Río Bravo para llegar a Estados Unidos.