El Partido Verde de Estados Unidos solicitó hoy un recuento de los votos de las elecciones presidenciales en Pensilvania, cuando se cumplía el plazo para pedirlo, debido a dudas surgidas sobre los centros de votación con urnas electrónicas.
Pese a que no hay evidencias de fraude, la candidata presidencial del Partido Verde, Jill Stein, solicitó el recuento ante el juez estatal y en más de un centenar de distritos electorales en todo el estado, de modo similar a como hizo la semana pasada en el estado de Wisconsin.
El secretario de Estado de Pensilvania, Pedro Cortés, aseguró que no hay pruebas de irregularidades o de ataques cibernéticos en las maquinas de votación electrónica del estado y consideró que un juez no podía forzar un recuento a nivel estatal.
No obstante, el Partido Verde aseguró en un comunicado que solicitó los recuentos distrito por distrito, algo que contemplan algunos condados del estado de Pensilvania siempre que se tenga a tres personas como solicitantes.
Además de Pensilvania y Wisconsin, el Partido Verde ha prometido solicitar, antes de que el miércoles finalice el plazo para hacerlo, un recuento en Michigan, el tercer estado del Medio Oeste que puso fin a casi tres décadas de dominio demócrata y fue clave en la victoria de Trump.
El partidos asegura que, pese a la falta de pruebas de fraude electoral o pirateo, quiere garantizar la "integridad" del sistema electoral y despejar las dudas en algunas de las máquinas de votación electrónicas empleadas.
Según algunos investigadores y científicos de datos de votación en estos tres estados de Medio Oeste se registraron "anomalías estadísticas", especialmente en condados donde se emplearon urnas electrónicas sin soporte de papel.
Con información de EFE