Uno de los planteamientos que surgió este miércoles (06.01.2021) luego del asalto al capitolio por manifestantes Pro-Trump, fue la aplicación de la Vigésimo Quinta Enmienda de la Constitución para destituir a Trump. ¿Qué es lo contempla?
El Político
Durante la sesión conjunta de las cámaras que se realizó para certificar la victoria de Joe Biden en las elecciones presideniales del 3 de noviembre, varios parlamentarios plantearon la necesidad de invocar la enmienda 25 de la Constitución para destituir al presidente saliente Donald Trump.
Para muchos Trump es el gran responsable del asalto violento al Capitolio. Lo congresistas le acusan de haber alentado este ataque a la sede de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, que arrojó un saldo de cuatro muertos y decenas de detenidos.
¿Qué es lo que dice esta enmienda?
Esta enmienda, vigente desde febrero de 1967, abarca la inhabilitación del Presidente de los Estados Unidos, así como el proceso de sucesión también en caso de fallecimiento o dimisión. Aunque se había debatido anteriormente, fue el asesinato del presidente Kennedy en 1963 el que propició esta modificación de la Constitución.
La enmienda 25 tiene cuatro secciones, y es la cuarta la que están invocando quienes piden apartar lo antes posible a Donald Trump del poder.
La sección cuarta abarca la posibilidad de apartar a un presidente por su incapacidad de cumplir "con los poderes y deberes de su cargo", y cuando este, además, se niegue a echarse a un lado.
¿Quién puede activar el procedimiento?
La iniciativa debe partir del vicepresidente, de la mayoría del Gabinete o de algún otro organismo que el Congreso pueda designar, quienes estimen (mediante un escrito) que el presidente no está capacitado para seguir en el cargo.
Si el presidente no lo acepta, hará falta que dos tercios de la Cámara de Representantes y del Senado voten a favor de la destitución de Trump y, por tanto, de que el vicepresidente Pence se convierta en presidente.
¿Puede Pence invocar la 25ª Enmienda para destituir a Trump?
Sí, pero necesita la aprobación de la mitad del gabinete del presidente para hacerlo. Luego, en la situación en la que el presidente impugna la destitución, necesita que ambas cámaras del Congreso la aprueben.
El texto de la 25ª Enmienda deja claro que hay dos formas de invocar la 25ª Enmienda: por solicitud del presidente o por acción del vicepresidente y el Gabinete.
Dice: “Siempre que el Vicepresidente y la mayoría de los funcionarios principales de los departamentos ejecutivos o de cualquier otro organismo que el Congreso pueda disponer por ley, transmita al Presidente pro tempore del Senado y al Presidente de la Cámara de Representantes su declaración escrita de que el presidente no puede cumplir con los poderes y deberes de su cargo, el vicepresidente asumirá inmediatamente los poderes y deberes del cargo como presidente interino ".
Básicamente, eso significa que el vicepresidente y más de la mitad del gabinete del presidente deben acordar destituir al presidente del poder y promover al vicepresidente a presidente en funciones. Luego, deben enviar una notificación al Congreso y luego el vicepresidente asume el cargo.
Pero el proceso no termina ahí.
El presidente puede impugnar su destitución, y luego el Congreso tiene varias semanas para votar. Dos tercios de ambas cámaras deben aprobar la destitución del presidente para que el vicepresidente siga siendo presidente interino.
¿Se ha aplicado antes?
Si. Según el Servicio de Investigación del Congreso , solo ha habido tres casos en los que se ha invocado la Enmienda 25, y cada vez fue por solicitud del presidente.
El presidente George W. Bush renunció brevemente a las riendas de la presidencia en 2002 y 2007 para realizar colonoscopias de rutina que requerían igualmente anestésicos. Bush regresó a la presidencia después de dos horas en ambos casos. En ambas ocasiones, Bush invocó específicamente la 25ª Enmienda.
Nunca un vicepresidente ha obligado a un presidente a dejar su cargo mediante el uso de la 25ª Enmienda.
Si Trump es destituído, ¿qué pasaría después?
La enmienda prevé que en caso de fallecimiento, dimisión o destitución del presidente, el vicepresidente toma el poder, por lo que, en caso de prosperar, Mike Pence se convertiría en presidente de los Estados Unidos, aunque solo hasta el próximo 20 de enero, cuando Joe Biden asumirá oficialmente la presidencia.
Además, el nuevo presidente tendría que nombrar un vicepresidente, que deberá ser aprobado por mayoría tanto por la Cámara de Representantes como por el Senado.
Fuentes: Constitución de los EE.UU. / Khou / La Sexta