Han pasado 15 días desde la votación. Casi todos los estados ya certificaron sus resultados. Mientras el país espera la votación de los Colegios Electorales, Trump se planta en sus denuncias de fraude y se "atrinchera" en la Casa Blanca.
El Político
Trump se atrinchera desde dos flancos el físico y el polìtico. Físicamente Donald Trump se "atrinchera" encerrado en la Casa Blanca. Con una agenda en la que hay poca o ninguna actividad.
Polítcamente se atrinchera en sus redes sociales. Desde ellas continua lanzando sus denuncias de fraude y pidiendo reconteo de votos.
“Evidence of voter fraud continues to grow, including 20,000 dead people on the Pennsylvania voters roll and many thousands all over the Country. Now, there has been an artificial number of votes in favor of Joe Biden.” @OANN
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) November 19, 2020
Paralelamente mueve su ejército de abogados con recursos ante los tribunales que hasta con pocos o nulos resultados. Además mantiene congelado cualquier acción hacia una transición de administraciones.
Según El Periódico no es que Trump no esté teniendo un impacto político aún moviéndose en esa “mentalidad de búnker”.
"Su negativa a poner en marcha la transición tiene consecuencias nacionales, no solo para Biden. Su estrategia de asalto a la legitimidad del proceso electoral está asestando golpes que tendrán efectos nocivos duraderos en la democracia de EEUU, incluyendo la confirmada desconfianza de un elevado porcentaje de estadounidenses en que los comicios sean justos. Y con la purga continua de aquellos a los que considera desleales está desarticulando importantes estructuras de gobierno", apunta el medio español.
Cita el medio las recientes destituciones del secretario de Defensa Mark Esper, del director de Seguridad de infraestructuras y ciberseguridad, Christopher Krebs, y de otros tres altos cargos de esa agencia del Departamento de Seguridad Nacional. Lo que " ha creado un vacío de liderazgo que se advierte especialmente peligroso en el periodo de transición".
El caso de Krebs, destaca por que fue en retaliación por asegurar que estas elecciones fueron “las más seguras de la historia”.
Estrategia jurídica
La mayor parte de la atención de Trump está orientada al reto a los resultados electorales. Y estos no cesan.
Este miércoles su campaña anunciaó que pagará tres millones de dólares a Wisconsin para que se realicen recuentos de votos en dos condados. De acuerdo a las proyecciones Biden habría ganado el estado por más de 20.000 votos.
Hasta el exgobernador republicano Scott Walker recordaba hace unos días que los dos últimos recuentos en el estado solo movieron los resultados en 300 y 131 votos respectivamente.
Trump tiene también la vista puesta en Georgia y Pensilvania. En el primer estado este miércoles concluye el recuento manual de los cerca de cinco millones de votos y, pese al hallazgo en cuatro condados favorables a Trump de varios miles de papeletas que no se habían contado, se espera que Biden mantenga más de 12.000 votos de ventaja.
Almost ZERO ballots rejected in Georgia this election. In years past, close to 4%. Not possible. Must have signature check on envelopes now. Very easy to do. Dems fighting because they got caught. Far more votes than needed for flip. Republicans must get tough! @BrianKempGA
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) November 19, 2020
En Pensilvania, mientras, el martes fracasó una de sus demandas ante el Supremo estatal pero se mantiene viva otra en un tribunal federal. La ventaja de Biden, no obstante, es de más de 58.000 votos.
A estas se suma otra en Nevada donde la campaña deTrump, presentó una nueva querella por supuestas "irregularidades sustanciales" y "fraude".
El peor de los escenarios
Pese a las grises perspectivas en los juzgados sigue existiendo el miedo a que Trump culmine otra posibilidad, un escenario que daría paso a una crisis constitucional: que los republicanos de algún estado con gobierno dividido no respeten la voluntad popular y seleccionen para el colegio electoral a electores pro Trump aunque haya ganado Biden.
Ese fantasma flotó durante unas horas el martes por la tarde, cuando los dos republicanos de una junta electoral en un condado de Michigan se negaron a certificar los resultados alegando inconsistencias entre los registros de votantes y los votos emitidos.
Voter Fraud in Detroit is rampant, and has been for many years!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) November 19, 2020
Finalmente los dos republicanos accedieron a certificar resultados con la condición de que haya una auditoría. Trump, que había celebrado su decisión inicial en Twitter, calló. Este miércoles, no obstante, ha hablado de acoso.
Fuentes: El País / El Periódico / Politico