“Acabo de dar una orden para que nuestra Guardia Nacional comience el proceso de retirada de Washington, ahora que todo está bajo perfecto control“, tuiteó el presidente de EE.UU., Donald Trump.
El Político
El presidente indicó que anoche se congregaron “muchos menos manifestantes de lo previsto”, pero advirtió que la Guardia Nacional “puede regresar rápidamente, si es necesario”.
Anteriormente, Trump afirmó que la manifestación del 6 de junio en la capital estadounidense es “mucho menor” de lo previsto y destacó el trabajo de las fuerzas de orden al respecto. “La Guardia Nacional, el Servicio Secreto y la Policía de la capital han estado haciendo un fantástico trabajo. ¡Gracias!”, destacó.
Este sábado, el presidente calificó de “extremadamente incompetente” a la alcaldesa del distrito de Columbia, Muriel Bowser, y afirmó que sin la intervención de la Guardia Nacional en las calles de la ciudad para restablecer la orden durante las protestas, la política “no se habría lucido mejor” que su homólogo de Mineápolis.
El lunes, Trump también reprochó al gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, no haber aceptado el despliegue de la Guardia Nacional ofrecido por la Casa Blanca. Por su parte, Cuomo acusó el miércoles al presidente de “no haber hecho nada positivo” para el estado y aumentar los impuestos “en Nueva York y otros estados demócratas”.
El presidente también ha repudiado los planes de reforma policial que el candidato a la Presidencia por el partido Demócrata, Joe Biden, y la bancada afromericana de la formación quieren plantear a partir de la próxima semana para impedir que se repita una muerte como la de Floyd, asfixiado por el entonces agente de Policía Derek Chauvin, que ha sido imputado por asesinato en segundo grado por aplastar con la rodilla el cuello de la víctima durante casi nueve minutos.
“El ‘dormilón’ de Joe Biden y la ‘Izquierda Demócrata Radical’ quieren retirar los fondos a la Policía. Yo quiero una Policía bien pagada. ¡Quiero ley y orden!”, ha concluido.
El partido Demócrata ha aclarado que esos planes no suponen una retirada de fondos sino una reestructuración de los mismos para mejorar las tácticas de detención y reducir el armamento militar del que disponen las fuerzas de seguridad norteamericanas.
Fuente: The Huffington Post