"Le deseo mucha suerte a la nueva administración. Creo que serán exitosos. Les dejamos los cimientos para hacer algo espectacular", pronunció Donald Trump en el cierre de su última alocución presidencial. Y expresó su gratitud al vicepresidente también saliente, Mike Pence, quien por cierto no le brindó compañía en su despedida en Maryland.
El Político
Durante el mitin escenificado en la Base de la Fuerza Aérea Andrews, simultáneamente con la ascensión a la Presidencia estadounidense de Joe Biden, la cadena de noticias Univisión comentó que Trump rompió con las tradiciones de un presidente saliente. En efecto, desalojó la Casa Blanca por la puerta de atrás. Y sin brindar la acostumbrada y cortés bienvenida al dignatario entrante.
Con Biden no compartió el café, la conversación de transición ni el apretón de manos. En Maryland improvisó un discurso durante el cual nunca mencionó al nuevo mandatario. Su único apego a la tradición fue dejar a Biden una carta en el escritorio de la Oficina Oval de la Casa Blanca. Hasta ahora el mandatario oficial no ha querido revelar su contenido. Y del cual afirmó que fue “muy generoso”.
"Siempre pelearé por ustedes", pronunció Trump ante la multitud que lo despidió en la pista de la base militar en el condado de Prince George. "Los estaré viendo, estaré escuchando y les diré que el futuro de este país nunca ha sido mejor".
Trump desea suerte y éxitos a la nueva administración
Trump pasó revista a los que consideró sus mayores éxitos gubernamentales. Entre ellos aludió a la creación de una fuerza espacial. Así como los recortes fiscales, las vacunas contra el COVID-19 –"virus chino", ironizó- y el bienestar económico.
En el transcurso de su última intervención oficial, concedió la palabra a su esposa Melania, trajeada a colores. Antes, abandonó la Casa Blanca vestida de negro.
Dijo con brevedad: "Ser su primera dama fue un gran honor. Gracias por su amor y apoyo".
En su reseña Univisión se remite a los resultados de las más recientes encuestas que aseguran que se marchó de la residencia oficial con el peor índice de popularidad histórico que haya tenido cualquier primera dama al final de un mandato. Como su esposo, tampoco hizo la cordial y acostumbrada invitación oficial a su sucesora, en este caso Jill Biden.
Fuente: Univisión